lunes, 16 de noviembre de 2009

La Cordillera Blanca


Homenaje a María Cristina Henao

El callejón de Huaylas es un corredor que se extiende entre la Cordillera Blanca y la Cordillera Negra - ramal de la Cordillera Blanca. El río Santa irriga este corredor desde Conococha - punto más elevado del callejón - hasta el cañón del Pato, lugar donde el río Santa corta la Cordillera Negra para ir a caer al Pacífico.

El 31 de mayo de 1970 la Cordillera Blanca fue sacudida por un terremoto que provocó un aluvión similar al registrado años después en Armero. Un bloque de hielo del nevado de Huascarán fue arrastrado por el río Santa hasta su desembocadura en el pacífico, sepultando a su paso cuanto se topó en el camino.

De la ciudad en que me encuentro - Huaraz -, sólo quedó en pie la plaza de armas. Actualmente Yungay es una población completamente nueva; y del ferrocarril que comunicaba Chimbote con Huallanca sólo quedó una carretera tan inhóspita como hermosa. Entre los 180 kms que separan Chimbote de Yuramarca no hay donde hospedarse. Mucha garra se necesita para tirar una carpa allí, entre piedras y guijarros. Huy, qué dolor de güevas!!!!

El corte de cordillera formado por el río Santa a la altura del tramo Caraz-Huallanca es insólito. A lo largo de 13 kms, 32 túneles penetran las entrañas de la Cordillera Negra para abrirle paso a la carretera más espectacular que uno se pueda imaginar. El cañón del Pato es uno de esos lugares que sólo despierta admiración! Recorrerlo es un verdadero placer!

La Cordillera Blanca preferiblemente debe ser visitada entre mayo y septiembre. En esos meses el cielo está despejado y se puede disfrutar de los nevados. De la laguna de Parón (4200 metros), ubicada a 32 kms de Caraz, sólo recuerdo el esfuerzo físico del down hill. El cielo estaba tan nublado que me tocó creer que había una laguna allí. Al final supo mostrar el dedo meñique.

En este momento me encuentro a 80 kms de Conococha, punto desde el cual se desciende a la Panamericana desde el callejón de Huaylas. En Patilvica tomaré un bus a Lima para retornar a Colombia la próxima semana. Esta última crónica está dedicada a María Cristina Henao, una ferviente seguidora de este blog con quien estaba construyendo una cercana relación.

Lamentablemente la semana pasada un infarto se la llevó. Regreso para estar al lado de los míos. Este viaje pierde sentido en medio del vacío de las personas que uno quiere. Les agradezco todo el apoyo y la fuerza que he sabido recibir de cada uno de ustedes. Un fuerte abrazo para todos. Ya vendrán otros tiempos.








3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Gracias!!!
    Aqui te estamos esperando...
    Ya sabes lo que siento.

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  3. Soy myriam henao, hermana de Maria Cristina.
    Que especial y sentido tu mensaje, es a la medida de lo que a ella le gusto toda la vida.
    Que todo salga bien en tu regreso.
    Un abrazo y gracias, myriam h.

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